En este anuncio pretendo hacer participar al expectador. Está claro que una matrioska no es “una” sino que en su interior hay muchas más. Por ello hago un símil con lo que hay dentro de una matrioska y lo que hay dentro de “Matrioska”, nuestra agencia. De esta forma, ofrezco infinidad de ideas que puede desarrollar nuestra agencia para cada uno de nuestros clientes. Además, lo que quiero también es impactar al expectador cuando vea el titular. Lo que he querido es que la primera frase sea más vistosa, con una letra más grande “NO ES UNA MATRIOSKA”, ya que el expectador se fijará y pensará “¿Cómo qué no? Es una forma de llamar su atención y que quiera saber más.
1) “Gíralo y verás hasta dónde podemos llegar”:
En este anuncio lo que pretendo sobre todo es hacer que el espectador se involucre, que no quede pasivo ante el anuncio, sino hacerle pensar y actuar para que él mismo pueda ver el anuncio y de esta forma poder generar en él una sonrisa. En primer lugar podemos apreciar que una matrioska tiene una forma con el número "ocho”. Quise aprovechar eso para desarrollar la idea que se me ocurrió. A partir de ahí vi la ventaja de que si girábamos ese número hacía la derecha podríamos obtener el signo de infinito. De esta forma el espectador sabría hasta dónde puede llegar la agencia.
Es una forma de que el consumidor no actúe como mero espectador, sino que participe. La publicidad ha cambiado mucho en los últimos años, y ya no vale con darle anuncios para que los vea, sino que debe sentirse participativo.
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